En una serranía, allá lejos en Margarita existía una comarca que se llamaba o se llama el Alto del Gallego, originalmente era una tribu Guaiqueri y de paso donde yo nací, pero eso no viene al caso, vivía ahí un muchacho que no había conocido la civilizacion, mas o menos como Tarzan, trabajador, inteligente e ignorante totalmente del mundo civilizado, ocurrió que en aquellos tiempos fue de visita o por joder el primo Torcuatro, jefe civil de Tacarigua Abajo, y al conocer a Jacinto se impresiono de una manera tal, pues como era posible que un muchacho a esa edad no conocía de nada, hablo con su protector que por razones obvias no voy a mencionar y se llevo a Jacinto a la civilizacion, lo inscribió en un colegio de la Asuncion de menores, pero con la palanka y la corrupción lo inscribieron, bueno amigo Jacinto en mes y medio aprobó la primaria y se enrumbo a la secundaria y en tres meses ya estaba mejor preparado que el mejor alumno de quinto año, se reunieron los profesores en el consejo de profesores y llegaron a la conclusión de que tenían entre si un fenómeno y deciden graduar a Jacinto de Bachiller, pero los estatutos dicen que para graduar a alguien este debe pasar un examen final, se dijeron esto no es ninguna traba, llamaron a Jacinto, lo pusieron al tanto de la situación y le comentaron: Jacinto es una sola pregunta, como estamos consciente que tu la vas a responder bien, te damos el diploma y rumbo a la universidad, Jacinto asi lo sintio y vino la pregunta:
Jacinto, a cuantos grados hierve el agua?
Jacinto raudo y veloz contesto: profesores a noventa grados, y los profesores dijeron coño Jacinto como te equivocas el agua hierve a cien grados, a lo que riposto Jacinto:
Coño e´ la madre si es verdad el que hierve a noventa grados es el angulo recto
Los profesores atónitos le dan una nueva oportunidad y le dicen vamos a ver Jacinto, queremos una respuesta rápida y de velocidad: ¿ cuanto son ocho por cinco? y Jacinto responde treinta y dos, los profesores defraudados le dicen: Coño Jacinto ocho por cinco son cuarenta y el humildemente les dijo: ¿que carajo querian ustedes nojoda velocidad o precisión?. Jacinto pidio revision de prueba y pienso que proximamente en este Blog, voy a tener la oportunidad de contarles otras vainas de como le ha ido Jacinto.
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